Ya lo comenté en la anterior entrada; este año voy a seguir la evolución de los huertos de Castelnou.Una de las cosas que más echo de menos cuando estoy fuera de mi pueblo es la comida. Por supuesto el principal porqué, es lo bien que cocina mi madre. Unas de las principales razones de esto es la calidad de los productos, que en los pueblos, generalmente es mucho mejor que en las ciudades.
La principal causa de esto es que las hortalizas y verduras siguen siendo de los huertos. Cuando yo era un crío la mayor parte de los alimentos que se usaban en las cocinas de Castelnou procedían de huertos y corrales. Ahora tan sólo quedan en Castelnou unos siete u ocho huertos y dos o tres corrales.
En este tiempo se siembran cosas como zanahorias, me decía el tio Valero que "había sembrao una levadica", lo que se suele denominar siembra directa. También en esta época se siembran las patatas, unos cuantos caballones, bastan para nutrir de patatas a toda una familia. Las patatas se siembran en caballones o siembra en línea, en ambos casos previamente se abona la tierra. Este abono que preferiblemente sigue siendo natural, me decía el tio Valero que se lo traía el pastor, ya que el ahora no tiene corral.
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En esta época también es normal ver pequeños montones de leña, o fajos, en los ribazos procedentes de la poda de las vides y frutales. Éstos que con la llegada de la primavera comiezan a sacar sus flores. En el pueblo se podan y limpian los jardines, dejando un Castelnou más atractivo, comenzando a ser más apetecible salir a pasear y disfrutar de todo esto.
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